El cráneo de Rudie
Cuando dejé de ser la misma apareció una puerta en mi interior, tenía un mensaje implícito, que era el camino que había decidido. Debía pasar pruebas, tuve que permanecer en un lugar hasta recibir instrucciones del encargado que busca a las personas dignas del camino. Era delgado, con lentes, considerado no muy sabio entre la gente. Me dijo que era posible que pasara la prueba, pero que el cráneo de “Rudie” iba a estar siempre presente. En ese momento otra persona me señaló a una mujer que estaba abriendo un refrigerador, era robusta de cabello rubio atado de cola de caballo, baja de estatura, era ella la que estaba haciendo la prueba. Seguía mi turno para impresionarla, me acerqué y sin decirme nada, comenzó. Me preguntó cosas complejas que no puedo mencionar; estaba nerviosa, pero confiada de que había respondido bien. Tras cada pregunta hacía un comentario arrogante dándome a entender que solo ella tenía la verdad. Así que, decepcionada me fui a mi lugar a dormir, me acosté y ...